Querido Pedro Panalmodóvar:
Recientemente nos hemos enterado de
que se te han panamaneado los billetes, tu conciencia impositiva ha hecho un
“offshore”, como un regate imposible de Messi, que también sabe cómo driblar la
base imponible de lo que va al saco de todos.
Existen decepciones que duelen
más que otras. Pedro, lo tuyo duele más, por ejemplo, que lo de Messi, sobre
todo porque te he visto con un pañuelo palestino al cuello señalando injusticias
con tu dedo manchego, posicionándote claramente del lado de los que vienen, de
siglos, perdiendo. Por eso jode más que tú, que legítimamente ganas mucho
dinero con tu arte y con tu industria, les racanees la parte que te toca pagar de
las tizas de un colegio público.
Imagino que después de esto, que
aunque pueda ser legal – cosa que está por ver- sabes que no es ético,
renunciarás a cualquier subvención a las que tu arte pueda tener derecho y también
que, cuando te duela algo más que el alma, irás a uno de los magníficos
hospitales públicos de Panamá.
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